INCIERTO DESTINO..........
("Represión y Acoso", foto de archivo)
¿ES LA MADRE DE ZAPATA UNA VÍCTIMA?
Angélica Mora
Nueva York
Apuntes de una Periodista
Se hace complicado ser imparcial con algunas noticias, porque hay temas que por si mismos escapan del balance natural del análisis.
Por eso, es difícil hablar del tema de Reyna Luisa, la madre del Mártir Orlando Zapata Tamayo. No por que falten elementos para el análisis, sino que por el contrario, estos sobran y las piezas no encajan en la forma correcta que deberían tener.
En el caso de Reyna Luisa se percibe malicia, desidia, alianzas extrañas y olvidos imperdonables. Está en marcha en este momento un nuevo tramo de la tragedia de esta madre, quien se apronta a comenzar una nueva vida en el exilio de los Estados Unidos.
Y al analizar el caso he visto mezquindad, ataques y ofensas contra una mujer, castigada por vivir en una tierra bella, gobernada desde hace más de medio siglo por la dinastía de dos tiranos.
He visto dignidad en Reyna Luisa. Y estoicismo.
Engendró a un ser luminoso, su hijo Orlando Zapata Tamayo, quien se entregó sin egoísmos, buscando un mundo mejor para los presos políticos. No desistió en su empeño, prosiguió con su huelga de hambre hasta el final y se convirtió en Mártir al ofrendar su vida por sus semejantes.
En el nuevo capítulo de su tragedia a Reyna Luisa y su familia la están enviando a Arizona. La decisión forma parte de esos acuerdos amañados entre La Habana, Washington y la Iglesia Católica, esta última, patrocinadora del grupo familiar.
El Dictador II no halla las horas que ese Símbolo de Lucha Pacífica desaparezca de la Isla, pero... bajo especiales condiciones.
Los acuerdos para sacar a Reyna Luisa de Cuba y que llegue al exilio, son los mismos que se hicieron con los últimos presos politicos: Desterrados a España casi a escondidas, desembarcados lejos y luego enviados fuera de Madrid.
Es el mismo tipo de pacto que están empleando con Reyna Luisa, enviada a un estado hermoso, pero foráneo. Donde los jubilados se retiran a vivir, atraidos por el aire seco del desierto.
Pero no fue pensando en qué clima le sentaría mejor a Reyna Luisa lo que decidió su ubicación, sino aminorar el impacto de su llegada. Quisieron neutralizar el fuego de sus declaraciones y apagar sus gritos de Asesinos!!, que no desarrollarán la fuerza que podrían haber tenido, de haber desembarcado en Miami.
Asimismo, los restos de Orlando Zapata Tamayo no van a tener el tipo de peregrinaje que se hubiera logrado en un cementerio de Miami, la capital del exilio cubano en Estados Unidos Donde tantos reposan, provenientes de esa Isla, ubicada a 90 millas y esperan cumplir el sueño del regreso, aunque estén convertidos en ceniza.
Reyna Luisa le dijo a Maripaz Martínez Nieto --quien es su apoyo desde España desde hace mucho tiempo-- que "quería estar en Miami", que deseaba "que su hijo descansara en esa tierra..."
Que por una pequeña enciclopedia había visto dónde estaba Arizona y le parecía "muy alejado de su gente...". Que agradecía a quienes le hubieran ayudado para estar en Arizona pero que ella "soñaba con Miami" al igual que el resto de la familia.
El lugar final donde residirán estos exiliados, pareciera --por ahora-- estar irremediablemente escogido...
A menos que el exilio de Miami recurra a los congresistas cubanoamericanos, como Ileana Ros-Lehtilen... y se logre un cambio en la orden de relocalización, de esta sufrida familia cubana.
No hay comentarios:
Publicar un comentario